CCOO, FINE y UGT anunciamos que vamos a intensificar el conflicto en el sector.
Los beneficios de la banca se quedan en las cúpulas y los accionistas, con excusas como:
que la subida de tipos aún no ha impactado en las cuentas de resultados (que se lo pregunten a la clientela y a la plantilla que ha visto como revisaban sus préstamos desde el mes de abril 0,5%, mayo 0,7%, junio 1,2%, julio 1,3% y 1,7% en agosto, en septiembre se prevé un 2,5% y la estimación para final de año es que estén en un 2,5-3% más que hace un año), el impuesto a la banca (como si clientela o plantilla tuviéramos que pagar el impacto fiscal sobre beneficios) o la imagen a la sociedad ( no demuestran pudor para subirse sus salarios pero sí los de las plantillas que somos parte y afectadas por la subida de tipos y el encarecimiento del coste de vida).
Mientras las plantillas y la sociedad se empobrecen, las cúpulas directivas se enriquecen por los mismos motivos.
Sería vergonzoso que se anuncien en los planes estratégicos más reparto de dividendos sin revisar el salario de trabajadores y trabajadoras.
La patronal no ha hecho sus deberes, nos exigen agilidad, producción, resultados pero parece que esas reglas no valen para ellos cuando no les interesa.
El escenario cuando firmamos el convenio sectorial era uno:
fuerte contracción económica, tipos de interés e inflación en negativo, previsiones de empeoramiento de todas las cifras, anuncios de fusión y amortización de miles de puestos de trabajo, beneficios escasos y roes por debajo del 6%
Y ahora ese escenario ha cambiado:
la inflación de 2021 fue de un 6,5% y la de 2022 en agosto ya es de un 10,5%, con previsiones de cierre en torno a esa cifra y descontrol de la misma en 2023. Los tipos de interés anunciados por el BCE son del 1,25% con el objetivo de llegar al 2% en el corto plazo; sólo por esto se prevén más de 3000MM de ingresos adicionales en la banca. El euríbor diario está en el 2,1% en estos momentos. Y los beneficios y roes se han disparado y las previsiones apuntan que se alcanzarán datos positivos históricos.
Todo esto nos legitima:
para pedir la apertura de la mesa de convenio y que se actualice la revisión de nuestros salarios. Pero la avaricia no tiene límites y la patronal se permite dilatar la negociación y no cumplir con sus responsabilidades con una plantilla. Una plantilla que ha mantenido en pie este sector en unas condiciones precarias, porque la amortización de empleo ha implicado peores condiciones laborales fruto de la fuerte presión para sacar cada vez más trabajo con menos personas.
No han dado respuesta a ninguno de nuestros planteamientos, dicen tener que seguir analizando (es increíble que las entidades financieras necesiten más de 3 meses para analizar los datos a los que todos tenemos acceso diariamente).
Os recordamos cuales son las propuestas que CCOO, FINE y UGT hemos llevado al Observatorio:
- Hemos exigido la apertura de la mesa negociadora del Convenio.
- Hemos propuesto un posible esquema negociador en materia salarial:
a. Recuperación de la parte variable del plus convenio 2021 y 2022.
b. Recuperación salarial de 2021: mediante fórmula a negociar y concretar.
c. Recuperación salarial de 2022:
i. Con revisión de tablas salariales desde Enero 2022.
ii. Inclusión de una cláusula de revisión a final de año en base al indicador o con la fórmula que se decida.
d. Cláusula de revisión para 2023 en base al indicador o con la fórmula que se decida.
e. Revisión de dietas, kilometraje, teletrabajo, etc.
f. En todo caso, estas revisiones y/o pagos no serán ni compensables, ni absorbibles. - Hemos trasladado la petición cada vez más recurrente de las plantillas para que exista la opción de préstamos de empleados a tipo fijo: nuevas operaciones, novaciones, en contrato privado.
Ya anunciamos que si no reaccionaban a tiempo emprenderíamos acciones. Nos han abocado al conflicto, si no quieren atender a razones en la mesa tendrán que seguir escuchando nuestros argumentos y reivindicaciones fuera de ella.
Hemos fijado la próxima reunión para el 4 de octubre. Os iremos informando de nuevas acciones porque en estos momentos se ha roto el clima de entendimiento.