CCOO iberCaja compartimos con toda la Plantilla la carta de una persona afiliada, que nos parece muy oportuna y acertada.
De parte del Señor cura, se hace saber que Dios es uno y trino… Análisis de la Epístola de nuestro San CEO a la plantilla, de 3 de marzo de 2021:
“las perspectivas de recuperación económica para este ejercicio se están corrigiendo ligeramente a la baja y, en particular, los sectores más afectados por las limitaciones (turismo, hostelería, ocio, transporte de pasajeros y comercio minorista no alimenticio) están viendo prolongado el impacto en su actividad.” Por eso tenemos a bien elevar los objetivos hasta lo imposible (e injustificable), ya que la situación del año anterior también supuso un gran retroceso en términos de crecimiento.
“En nuestro caso, como bien conocéis, están fijadas y muy claras ya las prioridades comerciales para este año, que hemos comenzado a desplegar con intensidad desde el primer momento en enero y febrero.” Por eso, de momento, “sólo” ocupan 40 folios, que requieren de varias licenciaturas y dedicación exclusiva para su comprensión. Trabajar para conseguirlos hay que hacerlo en “otra vida”. El Mesías no se da cuenta (o no quiere) de que el problema, es que los mansos son el problema.
“Y, finalmente, vamos a poner en marcha un nuevo Plan Estratégico, con el horizonte de 2023” ¡estamos salvados! Por suerte el papel todo lo soportará. Yo digo que eres el Mesías y de eso entiendo porque he seguido a varios.
“Enfatizo, una vez más como lo he venido haciendo a lo largo de toda la pandemia, que no hemos de bajar la guardia ni un ápice en la aplicación de las medidas de prevención establecidas y recomendadas por las autoridades sanitarias, ni en el día a día de nuestro trabajo, ni tampoco en nuestras relaciones sociales.” Claro que sí, sin rotación en las oficinas, volviendo al trabajo presencial, improvisando medidas, sin dotar de medios extra como mascarilla ffp2, sistemas de ventilación… pero recomendando que en nuestra vida privada no compartamos vehículo para ir al trabajo, minimicemos las relaciones sociales…
“Proteger nuestra salud y la de nuestros clientes continúa siendo una prioridad irrenunciable” pero los objetivos, reporting, presencialismo… están por delante. Los rezos y velas a los santos del Comité de Continuidad no son un protocolo preventivo efectivo.
“Creo sinceramente que hemos de estar satisfechos por los resultados alcanzados, que además hemos logrado manteniendo en todo momento una adecuada atención a clientes como servicio esencial” aunque por el camino hayamos expuesto a nuestras familias y arriesgado nuestra Salud… los jefes están satisfechos con su liquidación de RVO.
“Sin embargo, no podemos caer en la complacencia” tranquilos que para eso ya pronto habrá más jefes que empleados.
“aportemos todas nuestras capacidades y el máximo compromiso con este proyecto colectivo que nos une.” Pues si alguien conoce y puede aportar es la Plantilla, si algo necesita revisión es el sistema de RVO, que año tras año hace aguas, crea conflictos, rectificaciones, revisiones… y no será por las veces que mi sindicato, CCOO ha solicitado a la empresa el abrir una negociación/dialogo para hacerla más eficiente, atractiva, clara, medible, comprobable… pero no todas las capacidades son tenidas en cuenta.
“Os deseo a todos mucha salud, ánimo y perseverancia para que podamos seguir avanzando con éxito en este camino hacia” la consecución de unos objetivos estratégicos de la Entidad, que nos tememos no coincidirán con el grado de consecución de todos nosotros.
Aquí los bienaventurados, cada vez más, serán los que tienen intereses creados en el statu quo. Amén.
Hasta aquí la carta. Sólo nos resta suscribirla y denunciar que, a fecha de hoy, en el CMI todavía no están disponibles los objetivos de las oficinas. Lamentable y preocupante a partes iguales,